La principal alternativa a evitar que los All Blacks se proclamen de nuevo campeones del mundo en Japón, la selección inglesa, afronta su segundo envite en el campeonato, un enfrentamiento ante Estados Unidos, decimotercera en el ranking mundial de selecciones y combinado que no debe inquietar lo más mínimo a Inglaterra. Los británicos se estrenaron arrasando a Tonga (35-3) y deben continuar pasando el rodillo en un grupo en el que tras el encuentro ante los estadounidenses ya tendrán que afrontar los dos duelos complicados, los que les medirán a Argentina y Francia.
Inglaterra dejó muy buenas sensaciones en su debut y la única duda es si su victoria ante Estados Unidos será o no muy holgada. Nosotros creemos que llega en situación de cumplir con el hándicap propuesto.